El libro «El chico de las musarañas», coescrito por Ana Obregón y su hijo Aless Lequio, brinda un testimonio emocionalmente impactante acerca de cómo Obregón enfrentó la pérdida de Aless, su hijo, luego de una ardua batalla contra una enfermedad grave.
La obra toma su nombre de los escritos iniciales de Aless, comenzados tras recibir su diagnóstico de cáncer. Estos escritos, aunque inconclusos, están cargados de honestidad, sarcasmo y vitalidad, destacando su humor inconfundible. Los textos de Aless despliegan su potencial literario, su magnetismo y su singularidad, características que, indudablemente, lo habrían catapultado al éxito en la escritura.
Por su parte, Ana se expone auténticamente en la obra, describiendo un trayecto de fe, resistencia y valor. Ella comparte una miríada de emociones y sentimientos intensos y crudos que sumergen al lector en una vivencia única y memorable.
El libro se convierte en un emotivo tributo de amor maternal, una narración que sin lugar a dudas emocionará a los lectores y, de vez en cuando, les robará una sonrisa de comprensión y empatía.