“Hierba” es una novela gráfica de no ficción escrita por Keum Suk Gendry-Kim que cuenta la historia real de Lee Ok-Sun, una joven coreana que fue víctima de la esclavitud sexual durante la Segunda Guerra Mundial. El libro aborda temas como el racismo, la explotación y el sexismo, y ha sido publicado por la editorial Astiberri en febrero de 2022, siendo traducido a catorce idiomas.
La obra revela las terribles experiencias de Lee Ok-Sun, quien fue explotada como una “mujer de consuelo” por el ejército imperial japonés durante la Guerra del Pacífico. Basándose en conversaciones personales entre la autora y Lee Ok-Sun, “Hierba” proporciona un relato de primera mano de las atrocidades sufridas por estas mujeres. La escritura de Gendry-Kim se asemeja a un estilo factual y directo, evitando exageraciones y permitiendo que los hechos hablen por sí mismos.
La historia comienza con la venta de Lee Ok-Sun por parte de sus padres a una familia en Busan, quienes la prometieron educación pero la explotaron en labores domésticas. Posteriormente, fue secuestrada por soldados y llevada a un campamento en la Manchuria ocupada por los japoneses, donde comenzó su calvario como esclava sexual a los 15 años.
La ilustración desempeña un papel crucial en la obra, ya que los paisajes detallados contrastan con la cruda realidad representada. Las expresiones de las víctimas se simplifican para resaltar su deshumanización, mientras que los soldados japoneses se dibujan sin rostro, enfatizando su indiferencia y crueldad.
A pesar de la dureza de los hechos descritos, “Hierba” también muestra cómo Lee Ok-Sun logró recuperarse y llevar una vida relativamente normal, aunque marcada por las cicatrices de su pasado. La obra rinde un poderoso homenaje al espíritu humano y su capacidad de resistencia y supervivencia. Gendry-Kim amplía la narrativa al proporcionar un contexto contemporáneo y seguir los pasos de Lee Ok-Sun, otorgando un enfoque documental a la obra.
Aunque la lectura de “Hierba” no es fácil debido a la gravedad de los acontecimientos, es una lectura imprescindible. Gendry-Kim logra preservar una parte crucial de la historia, recordando los terribles sucesos del pasado y, sobre todo, honrando a las mujeres que sufrieron estas atrocidades.
